La Asociación de Mujeres por la Paz Mundial – AMPM – es una organización internacional dinámica comprometida con ofrecer a las mujeres la oportunidad para contribuir a la creación de una paz duradera en el mundo.
La AMPM afirma que la familia es la piedra angular de la paz en el mundo y que parejas maduras son el fundamento de familias afectuosas y fuertes.
Buscamos promover a la mujer para que desarrolle las cualidades de empatía, perdón y amor incondicional, y sea una ‘mujer de paz’, cultivando su carácter y corazón de servicio a los demás no solo hacia su familia biológica como también hacia los hombres, mujeres y niños del mundo.
Como organización de mujeres nos adherimos al principio de que la colaboración, las iniciativas y el fortalecimiento mutuo a través del intercambio racial,cultural y religioso es imprescindible para crear familias saludables y capacitadas para resolver los problemas de nuestras sociedades.
La AMPM es una organización sin ánimo de lucro y es miembro integrante de la Women’s Federation for World Peace International –WFWPI- que ostenta el status consultivo con carácter general en el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas –ECOSOC- y está asociada al Departamento de Información Pública de las Naciones Unidas.
La WFWPI fue creada por la Dra. Hak Ja Han Moon y su esposo el Rev. Sun Myung Moon. Ambos han trabajado juntos incansablemente a lo largo de más de 50 años para lograr la paz en el mundo.
Desarrollamos programas en diferentes áreas tales como ‘el Puente de la Paz’; Proyectos de Hermanamiento Racial; la Creación de Redes, Mujeres de Fe; Proyectos de Ayuda Humanitaria en África, Asia y América; la Iniciativa de Mujeres para la Paz en Oriente Medio; Iniciativas para el Matrimonio y la Familia, etc.
Declaración de Principios
Creemos que ambos hombre y mujer han sido creados a imagen de Dios, iguales en valor y, por tanto, iguales en las oportunidades de contribuir con sus cualidades y perspectivas únicas al liderazgo en una sociedad.
Creemos que es matrimonio es sagrado y que el núcleo familiar es la base para una sociedad sana.
Consideramos que la castidad antes del matrimonio y la fidelidad en el matrimonio son metas deseables que ayudarán a redirigir a nuestra juventud hacia una vida más constructiva y saludable.
Creemos que el egoísmo es la raíz de muchos de los problemas personales y de la sociedad; la corrección de esos problemas empezará con la enseñanza del verdadero amor y del valor de vivir por los demás.
Creemos que mediante la enseñanza a las familias de un modelo de padres verdaderos, estas será capaces de practicar el verdadero amor en el hogar y en cualquier otro nivel social.
Creemos que las mujeres de todo el mundo tienen el derecho a ser reconocidas. Apoyamos el deseo de la mujer a jugar un papel dirigente en la sociedad y rechazamos prácticas en que las mujeres son oprimidas o discriminadas.
Creemos que las mujeres pueden trascender tradiciones y doctrinas religiosas y barreras raciales, y junto con los hombres facilitar la paz mundial.
Creemos que la solución de los conflictos vendrá por medio del diálogo y la reconciliación, la comprensión y la compasión, el arrepentimiento y el perdón en vez del rencor y la violencia.